27 marzo, 2013

Legión Extranjera "La primer fábrica de hojas de afeitar de la Argentina"


Hace 3 meses tuve la oportunidad de entrevistar al señor Andrés Sola, hijo de unos de los hermanos Sola quienes fueran los dueños de la fábrica Legión Extranjera. 
Andrés tuvo la amabilidad de contarme la historia de esta mítica fábrica.
Escudo de publicidad para solapa, parte de nuestra colección.
¿Cómo fueron los orígenes de la fábrica y la marca Legión Extranjera?

            -El nombre tiene mucho que ver con mi abuela que era de Seuta donde estaba la base de legión extranjera Española y el padre de ella era legionario. El apellido es de origen Vasco Navarro.
Mi abuelo era comerciante, se había instalado en Villa Dominico y tenia una sociedad con Fiorito (que después fue dueño del banco Quilmes) y comerciaban con España entre otras cosas cueros y lanas.
En el año 1928 mi abuelo junto con 3 de sus hijos pusieron la fábrica de hojas de afeitar. La sociedad esta conformada por Manuel el hermano mayor y  Alejandro ambos con el 40 % cada uno y mi padre Andrés con el 20 %.
Posteriormente abrieron fabricas en Chile, Brasil, Perú, Uruguay, España y la última en Puerto Rico, fue precisamente en ese momento que comenzó la debacle, porque Manuel, medio que se conformó con lo que habían logrado, dijo “Con lo que tenemos estamos asegurados”,  mi padre que era el menor de los hermanos, había 18 años de diferencia con Manuel, quería continuar con la expansión de la empresa, por tal motivo mi padre regresó y dividieron la sociedad, quedándose mi padre con las fábricas de Uruguay y Chile y mis tíos con el resto.

¿En qué año fue la separación?

            En el año 48 o 49. En Uruguay la fábrica pasó a llamarse Fabrasa y fabricaban las marcas Ariel, Nicron, Frappe, Suprema, Pocitos y otras que no recuerdo. 
Lo curioso era que mi padre además representaba a Gillette en Uruguay la empresa se llamaba Asola Sociedad Anónima.

¿Cuándo tenían la fábrica en Uruguay donde vivían ?
         
            Mi padre vivía una semana aquí y otra en el Uruguay. La fábrica estaba ubicada frente al mercado central en Montevideo.
            Haciendo un poco de historia de Legión para atrás, en España durante la guerra civil, mi tío Manuel sacó 2 líneas de hojas de afeitar, que se llamaban Unión y Falange, para estar bien con los 2 bandos enfrentados.

¿Las máquinas para fabricar las hojas de que origen eran?

            Durante la 2 da guerra mundial año 39 o 40 mi padre fue a Alemania, y compró máquinas para renovar las existentes en Argentina, Uruguay y Chile.
El barco que salió de Alemania no solo traía las máquinas sino que también transportaba explosivos, que iba dejando en los puertos de abastecimiento de la flota alemana.
            En ese mismo viaje también fue a Suecia para conseguir los aceros para la fabricación de las hojas, logrando cerrar un convenio bastante grande. En la Argentina no se laminaba acero, no había esa tecnología, el acero fue siempre importado o de Suecia o de Solinger en Alemania.

¿Debieron pagar alguna franquicia para utilizar el nombre Legión Extranjera?

            No, de hecho la Legión siempre se afeitó con nuestras hojas. A partir que se puso la fábrica en Buenos Aires, se mandaban cajones con las maquinas y las hojas. Hay fotos de mi padre sacadas en la Legion.

Se que su padre tuvo otras empresas...

            Si, creó una empresa de publicidad que se llamaba Atacama, su objetivo era abaratar los costos publicitarios de Legión Extranjera. El segundo cliente de esta agencia fue Federal, porque mi padre era muy amigo de Delbene. Era curioso ver las 2 publicidades una con el soldado legionario y otra con el federal.
            En aquella época usaban como campaña publicitaria a los deportistas. En una oportunidad se hizo una promoción en el campeonato de lucha libre, donde el hombre Montaña, si ganaba el campeonato, iba a ser afeitado en público con Legión Extranjera. De ahí salían ediciones limitadas, que se utilizaban además para probar nuevos productos.
            También Legión auspiciaba todo lo que fuera deportes y cultura. Tenían
programas de radio de preguntas y respuestas que se llamaba “La Cabalgata del Saber”. Yankelevich le había ofrecido a Legión hacer una campaña publicitaria por TV en un programa de preguntas y respuestas, que no aceptaron y termino siendo Odol pregunta.
            Legión tuvo dos publicidades excelentes que fueron “si usted quiere que ella lo quiera aféitese con Legión Extranjera” y “varón dijo la partera se afeitará con Legión Extranjera”

¿Fabricaron hojas con otras marcas?

            Llegaron a fabricar 17 o 18 marcas diferentes. Salvo las fabricadas por Legión y Gillette, las únicas fábricas en la Argentina, todas las demás hojas eran importadas.
            Llegaron a fabricar perfumes, espuma de afeitar, maquinas de afeitar y hasta preservativos con marca Legión.
            En el Uruguay mi papá usaba mucho el juego de palabras, por ejemplo la hoja Pocitos decía "made in USA", yo le decía: Viejo, ¿Cómo made in USA? si la fabricamos en Uruguay, el decía: Claro hecho en Uruguay Sud América (USA).

¿Cuándo dejaron de fabricar en el Uruguay?

            En el año 1986. Las fábricas de Argentina y Uruguay terminaron igual, vendiendo filos para los cortes de peleteros.
            Legión había caído en desgracia, por decirlo de alguna manera, por el año 1968. La tecnología era ya obsoleta y no se renovó. Lo que mi tío había dicho que le iba a durar para siempre, no les alcanzo. Además se “metieron” otras personas, como decía mi papa “Se metieron los yernos”, es lo malo de las empresas familiares, se hacen pulpos muy grandes que terminan cayéndose.
            En el año 1990 mi padre trató de salvar la fábrica, los antiguos empleados le pidieron que levantara la convocatoria, cosa que hizo quedándose con todo el paquete accionario, que luego donó a los empleados, pero no hubo forma, se intentó traer máquinas de Valsano, Italia para fabricar unas máquinas que traía la espuma en el mango y hacer una campaña publicitaria muy grande, pero la marca ya había caído y no había una fuerza de venta apropiada, además semejante esfuerzo no tenia sentido, mi padre estaba ya muy enfermo.
Poco antes de fallecer fue estafado perdiendo Atacama Publicidad y la marca Legión Extranjera, que yo intente recuperar pero no lo conseguí.

He notado diferencias en el logo del legionario ¿A qué se debía?

            Eso era porque se hacían concursos para descubrir que cambiaba en la marca. Después de la segunda guerra mundial mi padre había traído 6 Jeep que se sortearon entre las personas que descubrieran las decencias del logo.


Fue el año en que se cambió la posición del fusil.


Llegaron a hacer mucho dinero con la fabrica de hojas de afeitar.

            Hicieron una fortuna incalculable, pero lamentablemente una disputa familiar absurda de continuar o no con la expansión de la empresa la liquidó.
            Llegaron a tener prácticamente tomado el mercado de la costa este de Estados Unidos, compitiendo mano a mano con Gillette. Al principio se exportaban desde Argentina y luego se llevaban desde la fábrica de Puerto Rico. Legión llegó a venderse en Japón.
            Durante la segunda guerra mundial le vendieron hojas a todos los ejércitos en conflicto, inclusive se han hallado fotos de hojas con el legionario en soldados norteamericanos.
            La fábrica de Puerto Rico finalmente se la quedó el administrado que se llamaba Rotman, que posteriormente fabricó cuchillos.
            Legión Extranjera fue una de las primeras multinacionales Argentinas.
            Durante la época de Perón trataron de cerrar la fábrica, porque le exigían colaboraciones, que si bien daban, no aceptaban exigencias como buenos vascos que eran. Por ese motivo inclusive Alejandro estuvo desaparecido como 20 días y gracias a la intervención de un diputado lograron que apareciera con vida.

¿Que parte del mercado llegaron a tener?

            Legión llego a tener el 80 % del mercado, Gillette puso una fábrica en la Argentina porque no podía penetrar en el mercado, pero luego con la fractura de los hermanos, la incorporación de tecnología y el despliegue publicitario, lograron desplazarlos.
            En el año 1950 Legión llegó a hacer una máquina de doble hoja que fue el principio del doble filo, se hacían máquinas donde se colocaba una hoja abajo, una banda en el medio y otra hoja arriba. Fue un desastre, rompieron caras a lo loco.
            La pelea de los hermanos fue muy grande, antes de la ruptura Manuel era para mi padre el ídolo, un genio a nivel negocios. Cuando se pelearon se dejaron de hablar y no se volvieron a ver.
Cuando Manuel falleció, su familia me llamó para ver si podían colocarlo en la bóveda familiar. En ese momento mi padre estaba en Estados Unidos, así que lo llamé para comentarle la situación, como habrá sido el encono que existía entre ellos que me dijo: “Decidilo vos, yo voy a respetar tu decisión, hacé lo que creas es mas conveniente”, mi padre sabía que yo no iba a decir que no.

01 marzo, 2013

Hoja El Submarino


Hoja que pertenece a la colección de Massimo Giacomelli a quien le agradecemos el envío de la imagen.


Los Tarantinos
     Viendo esta imagen del primer submarino con que contó la Armada Argentina "Los Tarantinos" casi no cabe dudas que la ilustración del la hoja se corresponde con esta.
     Los "Tarantinos", llamados así por venir de los Astillero "Franco Tosti", Taranto, Italia, fueron los tres primeros submarinos de la Armada Argentina.
   
  La ley N'° 11.378 sancionada el 29 de septiembre de 1926 autorizaba la compra de dos grupos de tres submarinos cada uno, pero sólo se logró la compra de un grupo. Por esta ley también se formó la Fuerza de Submarinos y la Base Naval de Mar del Plata.
      
Argentina era uno de los pocos países sudamericanos que aun no había incorporado a sus efectivos naves de este tipo, a pesar de tener personal de Oficiales los Tenientes de Fragata Francis Lajous, Osvaldo Repeto, Eduardo Ceballos y Vicente Ferrer, en instrucción desde 1917 en la Marina de Estados Unidos.
     Habiendo actuado además como instructores de planas mayores durante la primera Guerra Mundial. En reconocimiento a la capacidad profesional y abnegación demostrada en las misiones encomendadas, el Congreso de los E.E.U.U. les otorga la "Victory Medal" por los servicios prestados a la Marina de Guerra de los Estados Unidos durante el conflicto bélico.
     
Estas unidades y sus tripulantes pasarían a la historia con la denominación de “TARANTINOS”.
La construcción de los 3 sumergibles de “medio alcance” tipo Cavellini (en honor del Capitán del Genio Navale Italiano, Virgilio Cavellini) de doble casco. Los sumergibles de clase Cavellini fueron producidos en siete subclases distintas. Estos tipos de unidades, se distinguían por su robustez, maniobrabilidad, velocidad y un relativo confort para la tripulación.
     Los Cavellini fueron lo mejor que los astilleros italianos estaban en capacidad de construir en aquellos años.
    
 La orden general 103/928, bautizó a los submarinos "SANTA FE" (S1), "SANTIAGO DEL ESTERO" (S3) y "SALTA" (S2). La primera quilla se colocó el 25 de mayo de 1928, correspondiente al S-2; las del S-1 y S-3 fueron colocadas el 28 de mayo del mismo año.



Recepción de las unidades

     Las pruebas de mar se realizaron en el golfo de Tarento y en el mismo Mediterráneo, pusieron de manifiesto sus grandes cualidades técnicas.
     En el caso concreto del SANTIAGO DEL ESTERO rompió un récord con respecto a sus gemelos llegando a 114 mts de profundidad. Se cumplieron exitosamente las maniobras de asentamiento en el fondo y pruebas de refrigeración. De estas pruebas surgiría también que las unidades podrían emprender la navegación hacia la argentina sin aprovisionamiento de combustible.

    
   La primer unidad en ser entregada a las autoridades argentinas fue el SANTA FE en una importante ceremonia el 26 de octubre de 1932.
     Este importante acto se inicio con el discurso del Director del Astillero Tosi el Comendador Achille Piazza. El Contraalmirante Pedro Gully Jefe de la Misión Naval Argentina junto al Capitán de Fragata Ramón Poch, Jefe del Grupo de Sumergibles, el Comandante recientemente designado del SANTA FE, Teniente de Navío Ernesto Saadi Bonnet y el resto de la comitiva argentina, recibieron la nave en medio de ruidos de sirena y aplausos del publico. La otras dos unidades fueron entregadas: el SALTA el 25 de enero de 1933 y el SANTIAGO DEL ESTERO, 28 marzo de 1932.


El traslado

     El 25 de febrero de 1933 en horas del mediodía zarparon desde sus fondeaderos, las tres naves argentinas rumbo a Buenos Aires.